La gestiiologia como elemento para la gestion del Capital Intelectua (desde 09-11 hasta 11-11 9 am)

El capital intelectual es un tópico sobre el cual el interés de las empresas ha crecido rápidamente en los últimos años, especialmente en aquéllas en las que sus beneficios derivan principalmente de la innovación y de los servicios intensivos en conocimiento.

Como tambien abarca las relaciones con los clientes y los socios, los esfuerzos innovadores, la infraestructura de la compañía y el conocimiento y la pericia de los miembros de la organización. Para Stewart (1998), quien es precursor en este campo, el capital intelectual es la suma de todos los conocimientos que poseen los empleados y que otorgan a la empresa ventaja competitiva. El capital intelectual de una empresa es la suma del conocimiento de sus miembros y de la interpretación práctica del mismo.

Esta proposición pretende reconocer la existencia y la función generadora del capital intelectual, ello sustentado en que estamos inmersos en la consolidación y desarrollo de la Sociedad del Conocimiento. La cual es todavía una realidad inacabada, pero que evidencia la evolución de la economía a lo largo de los años, pasando de una era agrícola, a una era industrial, para finalizar en la actual era del conocimiento o de los intangibles.

Las Organizaciones modernas se desarrollan en un entorno altamente cambiante, donde las tecnologías caducan rápidamente y con ellas sus ventajas de ingreso y competitividad, dejando atrás toda una infraestructura creada para tal efecto, poniendo a las Organizaciones en puntos críticos para mantenerse en el mercado.

Enfrentar esta situación es un elemento constante del futuro de las Organizaciones, las cuales están obligadas a buscar alternativas para superarlas y mantenerse con vida en la competencia internacional, alcanzando niveles de eficiencia, eficacia y calidad estandarizados para la actividad que desempeñan.

El capital intelectual es el conjunto de activos intangibles, más importantes de las empresas basados en el conocimiento, entendiéndose por conocimiento al nuevo agente productor de capitales económicos y organizacionales. Hoy día, las empresas saben que el Capital Intelectual constituye la sostenibilidad corporativa, y entienden que poseen un activo muy valioso, por tanto, se debe identificar la naturaleza de estos activos inmateriales concebidos como activos intangibles, para establecer políticas contables, asegurar su administración y fomentar su crecimiento tanto en el ambiente interno y externo de la empresa. Las organizaciones en la actualidad deben actuar como motor del cambio  y anticipar los cambios en la cultura de la misma. El gestor del Conocimiento dentro de la empresa debe identificar y definir los roles genéricos que crean y mantienen la cultura del conocimiento, definir las competencias para cubrir esos roles, identificar las principales competencias que son necesarias para crear conocimiento, flujos, consenso y uso. En el paradigma de la gestiologia, el mundo actual de los negocios exige, gente calificada, motivada, comprometida con la empresa, que apoye los planes de crecimiento. Es necesario acotar que tanto los activos tangibles como los intangibles son necesarios para el funcionamiento de la empresa..  El total de los activos de las empresas se la puede comparar con un iceberg. Del 100% existente, solo se puede visualizar un 10%, que comprende al Capital Financiero, el 90% restante que se encuentra oculto, es el Capital Intelectual de la Empresa.
Un ejemplo del valor del conocimiento es la empresa Microsoft, una de las compañías más valiosas del mundo, pues posee ventajas competitivas que se originan de su capacidad para diseñar y crear software informático de un nivel de calidad constante, comercializado a través de su marca. Su creador, Bill Gates, es la fuerza impulsora con visión de futuro que produce conocimiento y agrega valor a su empresa. Por tanto, el monto de una acción de esta compañía en el mercado de valores no puede ser igual a su valor en libros o los libros deben reflejar el valor agregado, esa diferencia surge de una economía basada en la técnica y los conocimientos. Por consiguiente, el conocimiento es el bien más valorizable, y, por lo tanto, se debe buscar donde reside: en el individuo

La gestiólogia y el capital intelectual, sin dudas, están cambiando la forma en que se maneja hoy día las organizaciones en un mundo globalizado, con el fin de socializar el conocimiento y elevar la competencia y valor en el mercado donde esta tiene perspectivas tácticas y operativas, es más detallado que la gestión del capital intelectual y se centra en la forma de dar a conocer y administrar las actividades relacionadas con el conocimiento como su creación, captura, transformación y uso. Su función es planificar, implementar y controlar todas las actividades relacionadas con el conocimiento y los programas requeridos para la administración efectiva del capital intelectual. (Wiik, 1997).

La gestión del capital intelectual es la clave de la competitividad su capacidad para adaptarse a un entorno dinámico y generar valor en un futuro. Ninguna organización, con independencia de su naturaleza, escapa a la necesidad de considerar los valores intangibles, especialmente los relacionados con la gestión, transferencia y explotación del conocimiento .Las organizaciones modernas consideran al capital intelectual como ese elemento vital y estratégico que aseguran el éxito de las organizaciones desde la perspectiva de un futuro próximo donde facilita una mejora en el flujo de conocimientos y facilitando una mejora en la eficacia organizacional y así adaptándolo .

La perspectiva de la gestiologia abarca un papel muy importante dentro de las organizaciones modernas porque con ella hay una correcta gestión del conocimiento en la empresa que facilita una gestión más eficiente de elementos clave como: la información interna y externa en la organización ,la innovación empresarial, la creación de rutinas organizativas más eficaces, la coordinación entre los distintos niveles organizativos, la rápida incorporación y asimilación de nuevas capacidades a los equipos .Todo esto contribuye a crear procesos, productos y modelos de negocio más exitosos, estableciendo en las organizaciones que les permitan: mejorar los canales de distribución, mejores equipos de trabajo ,mejores relaciones con clientes, proveedores, empleados entre otros.

Pero sobre todo y lo más importante es disponer de la habilidad de obtener información, transformarla en conocimiento e incorporar este en la organización es la mejor ventaja con la que podemos dotar a nuestras empresas, la gestiologia le permite al capital intelectual contar con una organización adaptativa a las circunstancias cambiantes del entorno introduciendo los conocimiento en la empresa, tiene la virtud de transformar poco a poco las estructuras rígidas en elementos más flexibles, capaces de dotar a la empresa de la cintura necesaria para trasformar amenazas en oportunidades.

Según Edvinson y Malone (1999), únicamente el balance general no da indicio sobre la mención de la empresa, sus tradiciones y su filosofía no nos dice cuánto valen estas cosas, ni da la alarma cuando se pierden por mala gestión, las empresas que solo se ocupan de su balance general, pierden su memoria institucional según Brooking (1997), el capital intelectual no es nada nuevo, sino que ha estado presente desde el minuto en que el primer vendedor estableció una buena relación con un comprador. Más tarde, se le llamó fondo de comercio. Lo que ha sucedido en el lapso de las dos últimas décadas es una explosión en determinadas áreas sistemáticas claves, incluyendo los medios de comunicación y la técnica de la información y las noticias, que han compensado nuevas herramientas con las que se ha edificado una economía global.
Dentro de una organización o empresa, el capital intelectual es el conocimiento intelectual de esa estructura, la información intangible (que no es visible, y por tanto, no está recogida en ninguna parte) que posee y que puede originar valor.
Edvinson y Malone (1999) presentan el concepto de Capital Intelectual mediante la utilización de la siguiente metáfora: “Una corporación es como un árbol. Hay una parte que es visible (las frutas) y una parte que está esconde (las raíces). Si solamente te preocupas por las frutas, el árbol puede morir. Para que el árbol crezca y continúe dando frutos, será preciso que las raíces estén sanas y nutridas. Esto es válido para las empresas: si sólo nos concentramos en los frutos (los resultados financieros) e ignoramos los valores escondidos, la compañía no subsistirá en el largo plazo. Las estructuras modernas consideran al capital intelectual como ese elemento vital que aseguran el éxito de las formaciones desde la representación de un futuro próximo donde facilita un adelanto en el flujo de culturas, conocimientos y facilitando una mejora en la eficacia organizacional y así adaptándolo a un buen futuro
Sin duda, la fórmula conveniente para gestionar el capital intelectual, teniendo en cuenta estos activos científicos, es un factor preciso para el progreso de la empresa en este sentido, y como respuesta a esta necesidad o intranquilidad se han ejecutado numerosos estudios, y han nacido enfoques que siguen diferentes líneas de investigación pero con un mismo objetivo, por citar algunos: enfoque humano, enfoque de desarrollo e innovación, enfoque de proceso, enfoque económico o financiero, entre otros. Un ejemplo claro es Google Google es una compañía, principal subsidiaria de la multinacional estadounidense Alphabet Inc., especializada en productos y servicios relacionados con Internet, software, dispositivos electrónicos y otras tecnologías.

Primero que todo Dentro de una organización o empresa, el capital intelectual es el conocimiento de esa organización, la información intangible es decir que no es visible, y por tanto, no está recogida en ninguna parte que posee y que puede producir valor.

De tal forma las empresas para mantenerse competitivas deben gerenciar eficientemente los nuevos conocimientos, producto de estos cambios y la incidencia de los mismos en los procesos de producción y distribución; en la diferenciación de productos y servicios; en las variables del entorno y en la capacitación y actualización, a todos los niveles, de sus recursos humanos.

Por tanto, las organizaciones para poder competir y sobrevivir deben aprender a generar, identificar, evaluar, valorar, compartir y administrar sus conocimientos más valiosos. En particular, aquellos conocimientos que generan valor a los diversos actores que intervienen en la operación cotidiana de la organización, principalmente a los clientes a los que sirve o atiende. La importancia del capital intelectual es evidente, las organizaciones podrán tomar mejores decisiones, aumentaran su productividad, rentabilidad y competencia.

No hay que olvidar que en una economía global, el conocimiento puede ser la mayor ventaja competitiva de una empresa Es por ello que debe integrarse la gestión del conocimiento en la política de recursos humanos de las organizaciones modernas a fin de crear y almacenar conocimiento para su posterior distribución y uso. Ésta será la ventaja competitiva, el valor añadido que una empresa ha de crear para sus clientes: proponiendo el uso adecuado de la información, del conocimiento como fuente de diferenciación en un mercado cada vez más competitivo y global.

Es necesario mencionar que la gestiologia y el capital intelectual, forman parte del entorno competitivo de las organizaciones, que apoyada en la gerencia de los activos intangibles, propician conocimiento.  Según Sveiby (2000), el valor total de mercado de la empresa está formado por el patrimonio visible tangible más tres tipos de activos intangibles: la estructura interna (organización), la estructura externa (los clientes) y las capacidades (las personas), de modo que el valor de mercado de la empresa se puede interpretar como un reflejo directo del Balance Invisible, por tal motivo el capital intelectual permite que exista una estrecha relación entre los componente que menciona el autor teniendo en consideración que debe existir un equilibro entre ambas para que el resultado sea más notable en el desempeño organizacional, con el propósito de avanzar y mantener las ventajas competitivas de la empresa, buscando dinamizar los nuevos esquemas de convivencia y producción centrado en los principios de calidad e innovación.  En la cual debe aplicarse un adecuado manejo de los conocimientos de la empresa como también la tecnología adecuada que permita la optimización de procesos productivos y la presencia de herramientas que facilite la integración de nuevos conceptos.
Pero desde la perspectiva de la gestiologia permite generar valor dentro de las empresas mediante la correcta gestión  otorgando la suficiente importancia a los conocimientos, habilidades del personal, estrategias para generar aprendizaje, apoyo a la innovación, la experiencia para la mejora de procesos que permita enfrentar nuevos retos y mejore el nivel de competitividad y la complejidad de las operaciones empresariales.
Teniendo en claro que el conocimiento no solo puede ser adquirido por una sola persona, sino compartirlo con los demás para generar soluciones a las problemáticas detectadas en una empresa, no solo por un día si no estar en constante “renovación” debido a que este se vuelve más valioso y hay que competir por él.

Si una cosa debe estar clara es que en las organizaciones el activo más importante es el capital humano este es reconocido como el elemento primordial para estudiar el capital intelectual, el capital humano incluye todas las capacidades individuales, conocimientos, destrezas, experiencia, capacitación, aptitudes, motivación, formación, incorporación de nuevas tecnologías y su aporte a la empresa en general, todo aquello que el trabajador desarrolle y aporte en función del crecimiento de la misma, de forma armónica y coherente. Si se gestiona el capital intelectual a nivel organizacional a través de procesos, este se podrá desarrollar y utilizar con la mayor eficiencia y eficacia, todo esto en vías de alcanzar una organización innovadora con fuertes bases para mantenerse en la competitividad del mercado.
El valor de un negocio se mueve cada vez más de los activos fijos a los intangibles, hasta ahora empieza a despertar interés en las compañías en medir este activo, que contribuye a crear una brecha cada vez mas grande entre el valor contable y el valor de mercado; este cambio es cada vez mas dramático en la empresas de amplia base tecnológica. En el ámbito de la nueva economía, el capital intelectual proporciona un margen competitivo, sin embargo estos “recursos” no son medidos de manera adecuada; El capital intelectual (intangible) al igual que los recursos físicos necesariamente necesita ser valorados para mediciones de eficiencia, determinación de ingresos y valuación de la compañía.
Cabe destacar que el proceso de formación de “capital intelectual” debe considerarse como una actividad de inversión económica del mismo orden que la formación de capital material. En el futuro la inversión primaria no será en terrenos, planta o equipo, si no en personal.
Para finalizar Según Karl M. Wiig (1997) el conocimiento y el capital intelectual son conceptos relacionados pero en la gestión de cada uno de ellos, sus objetivos y límites son diferentes, son extensos, multidimensionales y cubren muchos aspectos de las actividades de las empresas, pero ambos a su vez son los activos más importantes porque representan el futuro potencial de las mismas. La gestión del Capital Intelectual se concentra básicamente en renovar y maximizar el valor de los activos intelectuales de la empresa, su función es tener un cuidado general con el capital intelectual de la empresa. La gestión del conocimiento se concentra en facilitar y gestionar las actividades relacionadas con el conocimiento como su creación, captura, transformación y uso, su función consiste en planear, implementar, operar y monitorear todas las actividades y programas relacionados con el conocimiento que se requiere para una gestión eficaz del capital intelectual.
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El capital intelectual es el conocimiento intelectual de esa organización, la información intangible (que no es visible, y por tanto, no está recogida en ninguna parte) que posee y que puede producir valor).
Citando a: Para Edvinson y Malone (1999), “La Gestión del Conocimiento se define como la identificación de categorías de conocimiento necesario para apoyar la estrategia empresarial global, representa un intento sistemático y organizado de utilizar el conocimiento dentro de una organización para mejorar sus resultados”
La gestión en el capital intelectual es la clave para la competitividad sostenida de las compañías en la nueva era del conocimiento, ninguna empresa con independencia de su naturaleza escapa a la necesidad de considerar valores intangibles relacionados con la gestión, transferencia y explotación del conocimiento.
Desde mí punto de vista para que una organización salga adelante primeramente se debe tener un capital humano con conocimientos la cual este apto en cuánto a su capacidad, habilidades, destrezas que puedan dar a conocer mediante el desarrollo de este conocimiento, también trayendo nuevas tecnologías, informaciones, innovar el capital humano para cada día la empresa evolucione y no se quede estancada.
Este capital intelectual se ha dado desde hace muchos años, empieza desde que un vendedor tiene la primera relación formal con un cliente.

 

En primer lugar, la gestiología se puede considerar como un proceso continuo, tecnológico y innovador, mediante el cual se implanta la tecnología necesaria para lograr los objetivos y metas de la organización en términos de calidad,efectividad, adicción de valor y competitividad.
  Por consiguiente, Steward (1997) define el capital intelectual, como material intelectual, conocimiento, información, propiedad intelectual, experiencia, que puede utilizarse para crear valor. Es fuerza cerebral colectiva. Es difícil de identificar y aun más de distribuir eficazmente. Pero quien lo encuentra y lo explota, triunfa.
  De igual manera, el capital intelectual hace referencia a los activos intangibles que permiten en mayor medida, la generación y mantenimiento de ventajas competitivas. Se trata entonces, de un conjunto de conocimientos individuales, colectivos y corporativos, que se utilizan para resolver problemas en la organización, por el cual el capital intelectual es la suma del capital humano, el capital estructural y el capital relacional:
*Capital humano: Son aquellas habilidades y capacidades que las personas adquieren a través del aprendizaje obtenido por medio de sus estudios realizados.
*Capital estructural: Es el conocimiento que la empresa aloja en su personal y sistemas, es decir, es el conocimiento que la organización consigue explicitar, sistematizar e internalizar y que en un principio puede estar latente en las personas y equipos de la empresa. La franquicia es un ejemplo de capital estructural.
*Capital relacional: Incluye las relaciones con el entorno, y más específicamente con los agentes económicos que participan en las diferentes fases de la cadena de valor del producto, como lo son: los proveedores, los competidores y los clientes. Quizás estos últimos han sido los más estudiados hasta el punto que muchos modelos hablan de capital cliente en vez de capital relacional.
  Seguidamente, los activos intangibles tienen su origen en los conocimientos, habilidades, valores y actitudes de las personas, los cuales son gestionados y medidos convenientemente, se transforman en una fuente de ventaja competitiva sostenible capaz de proporcionar valor organizativo y traducirse en beneficios importantes. Evidentemente, durante los últimos años se ha avanzado de manera significativa a la hora de considerar la gestión de los intangibles (marca, reputación corporativa, ética empresarial, responsabilidad social corporativa, buen gobierno, capital humano, capital organizativo o capital tecnológico) como elementos vitales y estratégicos para asegurar el éxito de las organizaciones. La toma de conciencia de las nuevas empresas está viniendo acompañada de un mayor reconocimiento profesional, académico y social. Del mismo modo, últimamente las grandes corporaciones comienzan a constituir departamentos especializados para gestionar adecuadamente estas nuevas disciplinas. A causa que los recursos intangibles están basados, principalmente, en la información y el conocimiento, por lo que su identificación y cuantificación se hace difícil. Además, los intangibles suelen ganar valor a medida que son utilizados, por lo que se exige una actualización constante de los mismos, mientras que el valor de los activos tangibles es conocido desde el principio y tiende a depreciarse.
  Indudablemente, los activos intangibles se han convertido en un elemento esencial para un número de empresas cada vez mayor, especialmente ahora que nos enfrentamos a un contexto complejo y a la necesidad de avanzar hacia modelos basados en la innovación, las nuevas tecnologías y el conocimiento. Debido a que todas las organizaciones modernas dependen de la especialización del conocimiento y de la transmisión de información.

Si bien sabemos que nos encontramos en un mundo cambiante donde las nuevas tecnologías y la innovación dentro de las organizaciones se incrementan día a día y van revolucionando la manera en que se manejan los procesos dentro de dichas organizaciones , ahí es donde entra en juego el papel como tal que juega el capital intelectual en estas ese capital que en las nuevas organizaciones es considerado un activo intangible el cual no se pueden tocar como tal pero tienen el potencial de producir valor día a día o a futuro por eso es necesario que desarrollemos estrategias para lograr que estos valores intangibles logren por completo la transferencia y explotación de todos sus conocimientos; dichas estrategias y procesos para lograr explotación del capital humano de estas organizaciones son la clave de la competitividad de las compañías en la nueva era del conocimiento. Su capacidad para adaptarse a un entorno dinámico y generar valor en un futuro; esta solo se lograra implementando procesos de capacitacion y la creación de espacios de conocimiento, donde se duvuelva a las personas la capacidad de pensar,auto organizarse y crear cosas nuevas.


La gestión del conocimiento y el capital intelectual, sin dudas, están cambiando la forma en que se maneja hoy la economía de las organizaciones en un mundo globalizado, con el fin de socializar el conocimiento y elevar la competencia y valor en el mercado de las organizaciones
Por lo tanto se debe mencionar que el capital intelectual se concentra básicamente en crear, conseguir y gestionar eficazmente todos los activos intelectuales los cuales son necesarios para conseguir así los objetivos de las empresas u organizaciones y poderlos terminar con éxito..